Cómo Crear un Plan de Social Media para tu Web o Blog
¿Tienes un blog? Entonces seguro que sabes la importancia de tener un buen plan de social media para compartir tus contenidos y dinamizar tus perfiles sociales.
Pero tanto si tienes un blog en tu web como si no lo tienes (ya estás tardando, por cierto) este post te ayudará a planificar lo necesario para que tus contenidos lleguen lo más lejos posible.
A día de hoy las redes sociales son imprescindibles para el buen funcionamiento y la imagen de una empresa; sin embargo, publicar de vez en cuando no es suficiente. Has de saber manejarlas con soltura.
¿Preparad@?
Lo primero que has de saber es en qué consiste un plan de social media, y después nos tiraremos de cabeza a la piscina decididos a conquistar las redes.
Si te parece ok, empezamos…
Estar en Redes Sociales no es participar de vez en cuando -ni siquiera de hacerlo asiduamente- y esperar que los clientes te vayan a llover por eso, y si lo consideras así deberías ir quitándote esa idea de la cabeza.
Cuando nos referimos a un plan de social media dentro de nuestra estrategia de marketing online, está claro que las redes sociales van a tener un gran protagonismo; sin embargo, la palabra “Plan” implica análisis, estrategias, acciones y mediciones que te lleven a una reinvención constante.
Se trata de planificar ciertas tácticas de comunicación adaptadas a las redes sociales y, cómo no, a sus usuarios. Comunicar, interactuar, escuchar y saber leer bien los movimientos correspondientes en cada momento son actitudes fundamentales, y eso es algo que lograrás controlar con una estrategia bien diseñada desde el principio, así que vamos a ello.
#Análisis
Necesitas hacer un estudio acerca de tu negocio y de TODO lo que tenga que ver con él.
Cuando decimos “todo” nos referimos a todo: producción, marketing, ventas, clientes, target, competencia, mercados, web, comunicación, economía… piensa que tu público va a tener un canal de comunicación para dirigirse a ti directamente, así que puede surgir cualquier tema de conversación relacionado con tu negocio.
Así pues, anótate en mayúsculas la obligación de diseñar un cuadro DAFO y encárgate de analizar las debilidades, las amenazas, las fortalezas y las oportunidades que envuelven a tu empresa, porque después continuaremos con el análisis.
¿Ya tenemos el DAFO?
Perfecto, ya hemos dado el primer paso, ahora centrémonos en los aspectos más relevantes y esenciales de este análisis que no ha hecho más que empezar: producto, mercado, target y competencia.
• Producto
Aquí se trata de vender, no solo de publicitar y convencer. Si te aventuras en esto del social media marketing damos por hecho que tienes algo que ofrecer y que consideras que merece la pena. No importa si es un servicio, un producto o simplemente información, lo que deseas es que se consuma.
Una vez tenemos claro esto, hazte todas las preguntas posibles con respecto al “qué” de todo este proceso. ¿Qué deseas vender? ¿Cuáles son sus puntos fuertes? ¿Y sus debilidades? ¿Por qué debería comprártelo? Convénceme.
¿Lo tienes claro? Piensa que, al fin y al cabo, éste va a ser el único protagonista de tu plan de social media: todo gira en torno a él, así que no podemos dejar ni un cabo suelto.
• Mercado
Sabemos qué quieres vender, pero no tenemos del todo claro dónde lo quieres vender, o mejor dicho ¿cuál es el mejor sitio donde venderlo? Si no lo sabes, búscalo. Cuando lo tengamos vamos a explotarlo como es debido.
Esta parte del análisis es maravillosa, sobre todo porque más adelante cuando nos encontremos en plena estrategia nos va a servir para segmentar, algo fundamental en redes sociales.
Pero, ¿qué es lo que hay que segmentar exactamente?
Te lo cuento ahora…
• Target
Efectivamente, no puedes vender tu producto ni tu servicio a cualquier hijo de vecino, porque por más que te esfuerces no lo va a querer todo el mundo. Reflexiona sobre quién consideras que podría interesarse en lo que vendes y entonces centraremos en ese grupo todos nuestros esfuerzos.
Lo has adivinado, estamos hablando del “a quién” dentro de nuestro plan de social media, y aunque luego entraremos de un modo más profundo en este aspecto, este camino deberá estar ya recorrido: debes conocer perfectamente a tu perfil de cliente y analizar su franja de edad, su género, su localización, sus gustos paralelos, su idioma y todo lo que se te pueda ocurrir al respecto.
No le vamos a regalar flores a un alérgico al polen, queremos lanzarnos a su conquista sabiendo lo que realmente le gusta, así jugaremos sobre seguro.
• Competencia
La competencia no siempre es tan mala como nos la han querido pintar; es decir, está claro que se trata de vender y, a ser posible, vender más que el vecino, pero ten claro que tu rival puede serte muy útil, sobre todo si hace las cosas bien.
Piensa que, por un lado, si le va bien en un lugar será porque hay las suficientes personas interesadas allí como para que su producto funcione, y como su producto compite con el tuyo no hay razón para pensar que tú no vayas a triunfar. Y algo similar ocurre con otros muchos aspectos, no hablamos de copiar, solo de inspirarte en su éxito. Estúdialo bien para perfeccionar lo que hace mejor y cambiar lo que hace mal.
#Estrategia
Una vez que se han sentado las bases ineludibles para un buen plan de social media podemos asegurarte que esto no ha hecho más que empezar, ya que a continuación tienes que diseñar una estrategia que, por supuesto, también tiene algunos puntos clave.
Con la mente puesta en tus perfiles de las redes sociales, solo te queda diseñar un gran boceto acerca de los resultados obtenidos en tu análisis y culminar un plan de social media que puede ser la clave de tu éxito.
• Objetivos
Ahora que ya sabes qué vas a vender, dónde lo vas a vender, a quién se lo vas a vender y con quién compites para hacerlo, es el momento de marcar el cómo. Marcar los objetivos es un paso fundamental dentro de tu plan de social media, quizás uno de los más relevantes, así que concéntrate al máximo en hacerlo perfecto.
Si la analítica eran los cimientos del edificio, los objetivos son la estructura, así que coge papel y bolígrafo y comienza a definirlos.
Trata de que estas metas sean alcanzables, ambiciosas y medibles; es decir, pon el listón alto, pero dentro de los límites que te puedas permitir, ya que de lo contrario este plan acabará siendo frustrante. Por otra parte, intenta que estos objetivos desprendan datos que se puedan medir para evaluarlos a posteriori.
¿Qué quieres conseguir con tu plan de social media? Anótalo aquí.
• Presupuesto
Cuando has analizado el panorama relativo a tu negocio, además de los puntos que hemos señalado como los más relevantes también hemos hablado de otros tantos. Si lo recuerdas, uno de ellos era la economía, y esto tiene mucho que ver con una estrategia, ya que el presupuesto que destines a la consecución de tus objetivos debe ser el adecuado, y eso es algo que únicamente puedes saber tú en base al estudio previamente realizado.
• Segmentación
De esto ya hemos hablado en el análisis del plan de social media para tu web o tu blog, y lo cierto es que llegados a este punto cobra todavía una mayor importancia. Ya has segmentado anteriormente a tu target y ahora hay que tratar de aplicar tus resultados de la mejor forma posible.
¿En qué red social deseas actuar? ¿En todas? Jaja… en fin
No hay ningún problema, en explorar varias redes sociales, pero atacar a todas es muy complicado y costoso y no te lo aconsejo. Yo seleccionaría 2 o 3 de las que hayas probado y veas que tu producto o servicio tiene mayor engagement y ya está.
Selecciona en cuáles de ellas tienen más presencia tus clientes potenciales y elige, como es obvio, las que más público te aseguren. Y, por supuesto, si vas a trabajar con todas ellas dedica más esfuerzo a las que más beneficios te vayan a reportar.
Y no solo eso, también deberías adaptar tus mensajes a cada red social, puesto que la recepción de los mismos variará de unas a otras. Aunque te puedan parecer todas iguales, ni siquiera se parecen en las interacciones, los modos de comunicación, las intenciones o los momentos en los que se utilizan; tampoco en lo que respecta a los dispositivos, así que tenlo todo en cuenta antes de pronunciarte.
• Acción
Las acciones son la última parte de una estrategia y, evidentemente, deben responder a todo el camino hecho hasta ahora, sobre todo en lo que respecta a los objetivos. Para cumplir con todo esto se hace necesario diseñar una agenda de acciones que marquen la hoja de ruta del plan de social media para tu web.
Es el punto y final de la estrategia, pero ni mucho menos el cierre del plan.
#Evaluación y optimización
Ahora que ya nos hemos puesto en marcha, cabe dejar claro que el trabajo en los social media nunca termina, pues debe mantener una evolución constante desde su inicio. Vuelve a analizar tu negocio desde el principio, rediseña las estrategias y renueva las acciones para no quedar nunca obsoleto; ten muy en cuenta que el mundo de las tecnologías, de Internet y, siendo más concretos, de las redes sociales, no deja nunca de crecer, fluctuar y reinventarse.
Haz tú lo propio o no te servirá de nada el duro trabajo realizado hasta ahora.
Además de todo lo que hemos visto hasta ahora no podemos cerrar el tema sin añadir las últimas pinceladas a nuestro plan de social media, las cuales no tienen una menor importancia que las anteriores, ni mucho menos. Algunos de estos extras están íntimamente ligados con la estrategia, otros con las acciones y otros con ambas, pero todos son fundamentales para alcanzar el éxito en tus estrategias.
#La web o el blog
No puedes hacer un plan de social media para tu web o tu blog sin tener en cuenta al protagonista. Eso está claro, y por eso lo debes haber analizado antes de gestionar esta estrategia; sin embargo, cabe hacer un apunte fundamental a este respecto: no pierdas de vista en ningún momento que estamos hablando del lugar al que van a llegar los clientes que captes a través de las redes.
Trata de que todo funcione perfectamente allí, en tus landing pages porque si después de todo el esfuerzo para atraer al público se encuentra con algo que no les gusta, las conversiones nunca llegarán y todo el trabajo que has hecho no te habrá servido de nada.
#Community manager
Si tu manejo de las redes sociales es maravilloso y dispones del tiempo suficiente para llevar a cabo todo el trabajo que hemos señalado en lo que va de post, olvídate de este punto por completo, tú serás tu propio community manager. De lo contrario, ten claro que necesitarás contar con personal dedicado a estas tareas, y eso es algo que también has de medir en tus presupuestos.
#Las herramientas
Otro punto a resaltar a estos efectos son las herramientas. Necesitas tener las mejores, porque te facilitarán notablemente las tareas; claro que ellas también se llevarán en algunos casos una parte de tu presupuesto, pero eso es algo que nuevamente vuelve a merecer la pena. Investiga un poco más para conocer las mejores o déjaselo a tu community manager, que seguro que las conoce sobradamente.
#La previsión
Las redes sociales son un invento maravilloso, pero si pretendes crear y desarrollar un buen plan de social media marketing para tu web o blog no debes perder de vista que también tienen sus aspectos negativos. Te encontrarás con auténticos seguidores de tus cuentas -y también de tus productos-, pero también te verás cara a cara con críticos de todo tipo, desde los constructivos -a los que en el fondo deberías considerar aliados-, hasta los destructivos.
Contempla en tu estrategia todo lo necesario para afrontar cualquier situación y saber reconducirla cuando la cosa se ponga fea, y tendrás un plan de social media realmente completo.
¿Qué nos sugerirías tú? ¿Eliminarías alguno de los aspectos que hemos valorado, o añadirías algo más al plan que te ofrecemos?
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